La osteoporosis es una enfermedad muy frecuente, que afecta sobre todo a personas de edad de ambos sexos. La manifestación clínica de la osteoporosis la constituyen las fracturas, entre las cuales, las más frecuentes son las de vértebras, extremidad distal del radio y fémur proximal.
El objetivo principal en el tratamiento de la osteoporosis es evitar o reducir la aparición de fracturas. Para ello, se deben integrar medidas no farmacológicas, como una dieta equilibrada, la realización habitual de ejercicio, la supresión o moderación de hábitos tóxicos (tabaco, exceso de alcohol) y en los casos en los que esté indicado, tomar un fármaco.
Disponemos de varios fármacos que reducen el riesgo de fractura, que han sido evaluados siguiendo los criterios de la “Medicina Basada en la Evidencia”. Debe tenerse en cuenta que no todos los fármacos reducen el riesgo de todas las fracturas. Así, algunos sólo reducen el riesgo de las fracturas vertebrales, otros las fracturas no vertebrales y otros, el riesgo de fractura de cadera.
En todos los estudios realizados con todos los fármacos, siempre se ha acompañado a los mismos de un suplemento de calcio y vitamina D. Por ello, la correcta prescripción de un tratamiento para la osteoporosis incluye las medidas generales no farmacológicas, el fármaco elegido y un suplemento de calcio y vitamina D.